11/2/12

Mi tiempo perdido

Guardo todavía el quejumbroso tonel,
no he dejado ennegrecer el vino,


yo soy una bóveda, es decir, mi corazón,
atrapados en la oscuridad, noche gigantesca,
puedo sentir tu mano
-tu mano de noche,
de sombra,
de epifanía-,


pero beber de aquel tonel, saber que mi piedra fermenta,
que mis ojos son laguna en tu paisaje,
no esposible decirlo.

9/1/12

El azul del cielo.

El azul que
se abalanza sobre mí
es similar a la distancia
inconmesurable
de nuestros cuerpos.


2/1/12

Tazas de Vidrio.

He visto madrugar
tus ojos
plantados en la aguda
tormenta,

a quién miraban
dichas pupilas negras;
en el suelo
dos monedas
han perdido
su sitio,

¡yo te las devuelvo,
tengo apiladas
unas sillas
sobre cuyas tazas
llueven
infinitos
inviernos!